Jason de Caires Taylor, Land.
Un partido
donde los jugadores tienen
los ojos vendados
Del otro lado puede haber
un rey
una pared
un pez
También puede estar el adversario.
Pero el adversario tiene
los ojos vendados
y abraza al rival
por error
El terreno se vuelve
piedra
fango
asfalto
cápsula
Los jugadores desconocen
las reglas
pero las respetan
puntualmente
El reglamento pasó
por tanto cielos
que revela un lenguaje intrincado
un alfabeto de números
o latidos
Entonces
el premio puede ser
la derrota
los perdedores agitan el pecho
de alegría
los ganadores sufren el tormento
de no haberse equivocado.
Los que juegan
tienen los ojos
vendados
y no saben cuántos son
ni cuántos días
ni cómo
ni cuándo
ni quién
les vendó
los ojos.