*
Estoy en una reunión de amigos, tocando la guitarra. De pronto recuerdo una vieja canción Uy, cuánto hace que no la canto... Pero cuando estoy a punto de hacerlo, alguien hace un comentario, nos ponemos a hablar de cualquier otra cosa, tomamos o comemos algo, las dispersiones propias de cualquier reunión.
Al rato me dispongo a retomar la canción, pero ya no recuerdo cuál era. Qué desastre mi memoria, digo. Y por más esfuerzos que hacemos todos, no logramos descubrir de cuál se trataba.
Me despierto.
Todavía no amaneció.
Sentado en el umbral de Dios, pienso de golpe.
En un primer momento no sé de dónde sale eso, pero al rato me doy cuenta: por suerte, la vigilia vino en auxilio del sueño.
* s/datos autor de la foto